Ocho alemanes, profesionistas en el área de la neurología, realizaron un estudio experimental que se hizo con 38 participantes de la tercera edad para comparar los cambios cerebrales presentados después de un programa de baile o un programa de ejercicios cardiovasculares.
Dicho experimento constó de separar a los participantes en dos grupos; un grupo asistió a las clases de baile y el otro asistió a las clases de ejercicios cardiovasculares, ambos realizaron dichas actividades dos veces por semana durante 6 meses.
En los resultados del estudio se encontró que toda actividad física promueve el nacimiento de nuevas neuronas pero normalmente éstas se mueren rápidamente ya que no se reintegran en los sistemas funcionales establecidos. El baile, de lo contrario, es una actividad que además de generar nuevas neuronas, las mantiene activas y las reintegra en las conexiones previamente hechas, favoreciendo específicamente en las áreas del cerebro que se encargan del razonamiento, memoria, abstracción, motricidad, regulación de emociones y espacialidad.
Se cree que estos beneficios se obtienen gracias a que el baile es una actividad que demanda orientación espacial coordinación, equilibrio, interacción, comunicación y sobre todo integración de ambos hemisferios del cerebro. Ya que las clases de baile son un constante proceso de aprendizaje, tiene muchos beneficios en nuestra cognición, ya que debemos ser capaces de integrar toda la información entrante para generar respuestas casi inmediatas, lo que estimula el cerebro de manera constante.
Los resultados de este experimento no nos parecieron sorprendentes, sino más bien importantes de difundir ya que tomar una clase de baile tiene muchos más beneficios que los que uno puede creer y sin darnos cuenta podemos desarrollar nuestro cerebro todos los días a la vez que hacemos lo que más nos gusta … bailar!!
Si quieres leer más acerca del tema, te invitamos a leer el artículo completo del experimento del que hablamos puedes leer el artículo completo aquí.